Amantes de lo ajeno.

Me apetece reírme del mundo. He reunido las fuerzas suficientes para no dejar la hoja en blanco, para superar todo lo que en su momento me hizo caer y derramar lágrimas sin sentido. O con ello. Nunca se sabe. He vaciado mi cabeza, todo en el mismo barco, e intento no volver a la deriva. Con suerte llegaré algún día a puerto fijo. Y saldré de la jaula, volaré y me comeré al león. Me comeré el mundo, de noche y de día, atrapando corazones. Y si te fijas bien, seguro que atisbas algo distinto. Lo llevo guardado bajo llave, y se apropia de mi como un veneno. Uno de esos sanos que te hacen revolverte de felicidad. Que falta amor, pero para mi es más que suficiente.
Y es que la vida me sonríe.
Y yo me estiro en la cama, cuando el sol me come las piernas y se lleva la palidez que me dejó tu marcha.
Y sí. Me gusta sentir que aún puedo reírme como Dios manda.




Y lo que venga, que llame a la puerta y entre.



Comentarios

  1. Dios mio! Que hermosas cada una de tus definiciones... me enamora :)
    Un beso

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  2. 'He reunido valor para no dejar la hoja en blanco.'
    Somos dueños de nuestro presente y nuestro futuro, supongo que la clave es no dejar nunca de intentarlo.
    Estrellas llenas de esperanza desde http://hazbrillaratusonrisa.blogspot.com.es/
    M.

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